Bienvenido a nuestro blog.

Queremos y esperamos que nuestro blog te pueda ayudar en todo lo que se refiere a la alimentación y medicina natural, la persona al frente es naturopata, kinisiologa holisitica, diplomada en homeopatía y en dietetica y nutrición por las universidades de León y de Valencia respectivamente, con muchos años de experiencia, a la que puedes consultar.

jueves, 30 de abril de 2015

ALBÓNDIGAS DE BROCOLI QUINUA


Albóndigas de brócoli y quinoa (preparación: 40 min/ cocción: 30 min)



Ingredientes: (salen unas 30 albóndigas)

Para las albóndigas:
- Un brócoli
- Un vaso de quinoa
- Un vaso de avena en copos
- Una taza de pan rallado
- Una cebolleta
- Medio pimiento rojo
- 2 zanahorias
- 2 dientes de ajo
- 2 cucharadas de levadura de
  cerveza
- Sal
- Pimienta
- 2 cucharadas de semillas de lino
- Agua y aceite de oliva

Para la salsa:

- 2 tomates maduros grandes
- Una cebolla mediana
- Medio pimiento rojo
- Medio vaso de leche de coco
- 2 cucharaditas de curry
- Sal

Para el acompañamiento:

- Yuca
- Cúrcuma
- Sal 
- Orégano

Elaboración:

Esta receta es bastante laboriosa. Así que, para no tener la vitro llena de cacharrada y tener que estar atendiendo a 3 fuegos a la vez yo haría primero la salsa. Para ello picamos la cebolla y el pimiento y los ponemos a dorar un poquito en la sartén con un poco de aceite y un poquito de sal para ayudar a que vayan soltando líquido. Le bajamos al fuego y dejamos que se vayan pochando mientras picamos los tomates. Cuando los tengamos los añadimos a la sartén, con otro poquito de sal y dejamos que se hagan a fuego medio/bajo, removiendo de vez en cuando (Si queréis podéis aprovechar para ir preparando los ingredientes de las albóndigas). Cuando ya esté todo bien pochado lo metemos en un baso batidor, batimos, lo devolvemos a la sartén y añadimos el vaso de leche de coco y las dos cucharaditas de curry. Corregimos la sal y podéis probar si le queréis echar más curry (Yo usé un tikka curry que venden como picante........ y a nivel de picor es un timo). Dejamos que se reduzca un poco la salsa mientras revolvemos y la reservamos.




Para empezar con las albóndigas ponemos a cocer el vaso de quinoa (yo primero las tuesto un poco en la olla sin nada y después añado el agua). Lavamos y troceamos el brócoli y lo metemos en la picadora. Lo echamos en un bol. Picamos también la cebolleta, el pimiento, las zanahorias y los dientes de ajo.



Con esta receta probé por primera vez una cosa...... Hay quien le echa a las albóndigas "tradicionales" huevo para hacerlas más jugosas. Así que probé a usar las semillas de lino como sustitutas del huevo (lo saqué de esta RECETA de pan de plátano vegano), para darles más jugosisdad y de paso consistencia. Para ello eché en un vaso dos cucharadas de semillas de lino y llené después con agua hasta la mitad. Lo metí en el micro un minuto y lo dejé reposar (las semillas de lino sueltan una especie de gelatina). Pasados 10 min. más o menos puse la mezcla en un vaso batidor con un chorrito de aceite y lo batí todo bien. Queda una mezcla muy viscosa tipo huevo batido.  



Por otra parte cogemos un vaso lleno de copos de avena y lo regamos con agua para meterlo un minuto al micro (podéis echarle caldo de verduras caliente y pasar del micro) y dejamos reposar. 



Cuando por fin tengamos todo esto listo cogemos el bol con las verduras picadas y le añadimos la quinoa cocida, la avena, las dos cucharadas de levadura de cerveza, las semillas de lino batidas, un chorrito de aceite y empezamos a amasar. Poco a poco vamos añadiendo el pan rallado. La mezcla irá cogiendo consistencia al mezclarse bien los ingredientes. Si veis que le hace falta podéis echar mano de la harina y echarle una cucharada. Cuando la mezcla sea manejable vamos haciendo bolas medianas y pasándolas por harina y las reservamos. (A mi me salieron 16 albóndigas y con el resto dejé preparadas para congelar 6 hamburguesas. ¡Ser vegano no es caro!) 


Antes de poner a freír las albóndigas podemos dejar preparada la yuca. Así que la pelamos y la cortamos en daditos. La metemos en un bol y le echamos un poco de sal y un poco de cúrcuma. 



Ahora toca ponerse a freír albóndigas y yuca. Si veis la foto de los ingredientes hay por ahí un vaso de vino. A veces hago patatas nuevas (de estas pequeñitas, las que venden en el carrefour como patata de guarnición) poniéndolas a dorar enteras en aceite (que las cubra) y cuando ya están bien doraditas retiro la sartén del fuego para que enfríe un poco el aceite y añado medio vaso de vino y medio de caldo de verduras. Lo pongo otra vez al fuego (medio) y dejo que reduzca. Quedan unas patatas riquísimas. Hoy comprobé que con la yuca la cosa no funciona. Así que mejor que prescindáis del vino porque le deja un sabor amargo que no me gustó demasiado. O si no probasteis a hacerlas así, podéis hacer las patatas porque quedan de vicio.

Volviendo a la receta sólo queda retirar la yuca del aceite y ponerla en papel absorbente para eliminar el exceso de aceite y echarle un poco de orégano por encima.

Ponemos también en papel absorbente las albóndigas y presentamos junto a la yuca bañándolas en la salsa de tomate al curry. Listo.

 Fuente Mute Food, Tito

miércoles, 29 de abril de 2015

HUMUS DE GUISANTES CON CURRI



2 - 3 PERSONAS

Ingredientes

200 gr de guisantes crudos
1 cucharada de tahín tostado
1 diente de ajo
1 cucharadita de curry
1 cucharadita de cebolla en polvo
1/2 cucharadita de anís en grano
Agua
Sal, pimienta, pimentón picante y aceite de oliva virgen extra.



Elaboración

- En una sartén antiadherente con un poquito de aceite y sal, saltear los guisantes crudos. Cuando estén algo salteaditos, añadir agua que los cubra, la cucharadita de curry y tapar. Dejar hervir hasta que el agua se consuma prácticamente toda. Apagar el fuego y dejar enfriar.

- Añadir el contenido de la sartén en un bol junto con el diente de ajo,el tahín, el anís, la cebolla en polvo, un poco de agua y sal. Triturar con la batidora de brazo hasta textura homogénea. Si hace falta corregir de agua se añade un poco más.

- Para emplatar, añadir el untable en un recipiente, crear textura en la superficie con la ayuda de una cuchara, rociar con aceite de oliva, espolvorear con pimentón picante y curry, y añadir unos granos de anís para decorar.

¡Y listo! ¿Habéis visto que fácil?



Lo podéis hacer también con guisantes en conserva o congelados, siguiendo el mismo sistema pero controlando la cantidad de agua para que no quede demasiado aguado. El sabor no va a ser el mismo, pero si a vosotros os gustan los guisantes así, seguro que os encantará.

Esta es una receta que sorprende por el juego de sabores con el anís y el curry ¡merece la pena probarlo!

Os mando un abrazo a todos! y recordad que podéis compartir vuestras fotos en mis redes sociales, etiquetándome y así las veo ¡me encanta cuando hacéis recetas mías! No hay más satisfacción que ver que os animáis a cocinar de esta forma tan saludable y llenita de nutrientes.

Vero.
@embellecethe.

viernes, 24 de abril de 2015

LUNA NUEVA APROVECHA SUS ENERGIAS

http://larutadelailuminacion.blogspot.com.es/2015/04/luna-nueva-aprovecha-sus-energias.html?utm_source=feedburner&utm_medium=email&utm_campaign=Feed:+HablandoDeConciencia+(Hablando+de+Conciencia)

LOS PROBIOTICOS Y SU BENEFICIOS

Descubre los Probióticos y sus Beneficios
Los alimentos probióticosson aquellos que contienen alguna o varias  especies de bacterias que una vez que entran a nuestro sistema digestivo se acoplan a nuestra flora bacteriana de forma positiva, mejorando el cinturón de defensas que tenemos en ésta importante región de nuestros cuerpos, receptora de todo lo que entra por nuestras bocas, y es que hay que aceptarlo, es imposible conseguir aislarnos todo el tiempo de las bacterias perjudiciales que pululan alrededor de nuestros alimentos, tan sólo hace falta que el viento arrastre un poco de tierra, que el agua se contamine ligeramente o que uno de nuestras queridas verduras no sea limpiada adecuadamente, todo el día a todas horas nos exponemos a éstas situaciones y por suerte nuestro sistema inmune es muy efectivo defendiéndonos y por ello no nos enfermamos a diario, pero también hay que echarle una mano, para que no sucumba ante algunos bichos que nos harán pasar muy malos ratos.
Los alimentos que han sido desarrollados y que más comúnmente contienen éstas bacterias son los alimentos fermentados (cuando son preparados adecuada e higiénicamente) siendo los derivados de lácteoslos más populares para conseguir tan deseadas bacterias. El concepto de modular el tipo de microorganismos que viven en nuestros cuerpos es un concepto que nació a principios del siglo pasado, buscando seleccionar algunos microorganismos que pudieran competir contra los que causan daño en nuestros cuerpos al hospedarse en ellos y con ello ayudando al de por sí ya gran trabajo que nuestro sistema inmune hace. Los microorganismos dentro de los alimentos probióticos con más fama son los lactobacilos.
Los lactobacilos son bacterias que resultan benéficas tanto en el tracto gastrointestinal, para hombres y mujeres, y son recomendados para tratar casos agudos de diarrea, que son causados en la mayoría de los casos por bacterias que nos perjudican. Sin embargo no es la única forma de protección que nos dan, cuando nosotros requerimos tomar antibióticos, perdemos gran parte de nuestra flora intestinal natural  (incluyendo los tratamientos para desparasitarnos) al ser tratamientos no selectivos no sólo arrasan con los bacterias o parásitos que nos hacen daño, también destruirán las bacterias benéficas que se asocian a nosotros, el no tomar alimentos probióticos, como bebidas lácteas probióticas, yogurts  o alimentos como el chucrut (que es col fermentada) tras concluir uno de éstos tratamientos puede hacer que después de tomar los antibióticos padezcamos problemas intestinales, pues al desaparecer las bacterias benéficas, se vuelve un campo abierto para que se acomoden cuantas bacterias perjudiciales puedan evadir nuestro sistema inmune.
Hay muchas especies de lactobacilosL. casei y L. acidophilus  son algunas de las más famosas, y a su vez se dividen en numerosas cepas que pueden tener propiedades diferentes y estar registradas por diversas compañías o instituciones, quienes harán promoción de sus beneficios que comercialicen y de los cuales vale la pena informarse para ver si se adecuan a los efectos que buscamos obtener en nuestros cuerpos.
Dependiendo de éstas cualidades hay lactobacilos que pueden aportarnos ayuda para tolerar la lactosa, controlar lo niveles de colesterol, ayudarnos a contrarrestar problemas inflamatorios, ayudarnos a la producción devitaminas (como la K, el ácido fólico y la B12), problemas de flatulencias, entre otros interesantes efectos.
Las cepas de L. acidophilus, que muy comúnmente vienen anunciadas en nuestras bebidas lácticas probióticas son parte de esas que ayudan digerir mejor aquellos productos que contienen lactosa y que cuestan a aquellos que tienen intolerancia de éste azúcar. Por otro lado L. casei es famoso por controlar las colonias de bacterias de Helicobacter pilori, que en algunas ocasiones son asociadas con problemas de gastritis, L. casei puede ser encontrada también en algunos quesos.
Sin embargo como todo en ésta vida, hay efectos indeseables también en los lactobacilos, que siempre tenemos que poner en la balanza cuando deseamos consumirlos, pues hasta un exceso de agua puede resultar nociva para nuestra salud, lo importante es que en lo que consumimos siempre sea mayor el efecto benéfico que los impactos negativos, y en el caso de los lactobacilos el impacto positivo resulta mayor en la mayoría de los casos. Entre los efectos que en ocasiones pueden no ser muy deseados, es que los lactobacilos en nuestra boca pueden ser fuente de caries y hay a quien  le pueden causar alergias.
No todos los productos que dicen contener lactobacilos o probióticos necesariamente son benéficos, pues en ocasiones las cepas de bacteriasque usan no son las adecuadas para atravesar vía oral nuestro ácidos gástricos, y al final sólo ingerimos una bebida con sabor dulce o un yogurt que no aportan mucho en cuanto a protección de nuestra flora intestinal (debido a que se requiere la tecnología y la investigación adecuada para saber generar un producto de calidad) y también existe la posibilidad de que haya personas a las que no les hagan efectos. Sin embargo el saber que hay alimentos que poseen un componente vivo que posteriormente se vuelve parte de nosotros es algo revolucionario y que vale la pena seguir explorando en los alimentos que encontramos a diario.

Fuente, biomanantial

FIDEGUA VEGAMA



3 PERSONAS

Ingredientes

1 vaso de fideos de fideuà (a mi me gustan estos curvaditos con el agujero en medio)
2 vasos de caldo de verduras (si no tienes, dos vasos de agua y media pastilla de caldo de verduras)
1/4 de cucharadita de miso
20 gr de alga espagueti de mar en seco
100 gr de tofu firme
3 tomates pequeños
1 cebolla
3 dientes de ajo
1/4 pimiento rojo
1/4 pimiento verde
Pimentón de la Vera
Sal y Aceite de Oliva Virgen Extra

Elaboración

- Rallar los tomates y la cebolla. Pelar y majar dos de los tres dientes de ajo. Juntar la cebolla, el ajo majado y el tomate rallado en un bol y remover hasta que se mezcle bien. Reservar.

- Hidratar las algas. Con un vaso de agua caliente añadir las algas durante el tiempo suficiente para que se hidraten (alrededor de 20 minutos).

- Cortar a taquitos el tofu. Cortar a daditos los dos tipos de pimiento y laminar el ajo sobrante que no hemos majado.

- En una sartén grande o una paella, añadir aceite de oliva y un poco de sal. Cuando el aceite esté caliente, echar el ajo y los pimientos. Sofreir.

- Cuando estén, añadir el tofu y el alga espagueti de mar que ya estará hidratada cortada en tiras de dos dedos de largo. Saltear.

- Cuando empiece a dorarse, añadir la mezcla de tomate, cebolla y ajo que tenemos preparado en el bol. Corregir de aceite de oliva si hace falta, y sofreir a fuego medio removiendo constantemente.

- Oler el vapor que sale de la comida. Cuando deje de tener notas ácidas, añadiremos los fideos y los sofreiremos junto a toda la mezcla durante unos minutos.

- Añadir el caldo y espolvorear un poco de pimentón de la Vera. Si es caldo de verduras, calentarlo un poco antes y disolver el miso en él. Si es agua con pastilla de verduras: usar el agua de las algas, disolver el miso y la pastilla de caldo de verduras.

- Subir el fuego hasta que empiece a hervir. En ese momento lo bajaremos de tal forma que el hervor sea controlado y nada violento. Con la cuchara de madera colocaremos bien los ingredientes y ya no se removerá más.

- En 20 minutos aproximadamente se habrá consumido casi todo el caldo, pero no está realmente hecha hasta que cambia el sonido que emite la cocción. Cuando empieza a sonar como si fueran pequeñas ramitas que se rompen, ese es el momento en el que ya está. Aquí podemos hacer dos cosas: apagar el fuego, o darle un toque fuerte de fuego para hacer el delicioso y tradicional socarrat.

- Apagar el fuego, dejar reposar unos minutos antes de servir y ¡listo!.




¡Facilísimo!

Espero que os animéis a hacer esta fideuà. Realmente yo cerraba los ojos y me recordaba al sabor de la fideuà tradicional. Y ya si lo servís con veganesa de ajo como se sirve tracicionalmente, sustituyendo al ajoaceite ya es morir de placer sensorial.

¿No os apetece este dominguito? ¡¿A que sí?! 

Un abrazo a todos los lectores y muchas gracias por pasaros.

Vero.
@embellecethe.

domingo, 19 de abril de 2015

lunes, 13 de abril de 2015

TORTELINI CON PESTO



2 PERSONAS

Ingredientes

1 paquete de Tortelinis de Espelta rellenos de verduras de la marca Natursoy
2 tomates secos en aceite
3 cucharadas del aceite del tomate seco
3 cucharaditas de semillas de girasol tostadas
1 puñado de brócoli (lo que te quepa en el dorso de la mano)
1/2 diente de ajo
Aceite de oliva virgen extra
Sal y pimienta al gusto.
Orégano y Pimentón picante

Elaboración

- Poner a hervir la pasta con la suficiente agua para que puedan moverse y crecer. Al ser pasta fresca yo soy partidaria de que el agua no hierva de forma violenta, porque si no, puede cocerse mucho por fuera (incluso romper la pasta) y que el relleno quede duro, sin hidratar. Mejor fuego medio, con cazuela tapada y hervor controlado. En el paquete pone 8-10 minutos, yo lo tuve 15, y luego apagué el fuego, tapé la cazuela y los dejé reposando con el agua caliente durante 5 minutos más. Así quedaron perfectos y no se rompieron.

- Mientras hierve la pasta, ponemos el brócoli a escaldar en la misma cazuela. Con 3 minutos es suficiente.

- Sacamos el brócoli, lo escurrimos bien y lo añadimos a un bol.

- Añadimos a ese bol el resto de ingredientes de la lista y trituramos hasta que quede todo bien picadito.

- Cuando esté bien picado, lo ponemos en un bote de cristal y añadimos aceite de oliva virgen extra al gusto.


- Para emplatar. escurrir bien la pasta, poner la mitad en cada plato, añadir la mitad de la cantidad del pesto en el centro, rociar con aceite de oliva y espolvorear con orégano y pimentón picante.

¡Y listo! Pasta rellena con un pesto delicious para comer ¡que antojo me quité! jajaja

Este pesto puedes hacerlo y reservarlo en la nevera. Cuanto más aceite le pongas, más se conservará. Yo suelo hacer cantidad para dos personas y no tener que guardarlo, aunque si hiciera más... ¡tampoco duraría! jejejej

Pruébalo en tostas, como base en montaditos, sandwiches, con pasta normal... ¡estoy segura que este pesto te va a encantar!

¡Un abrazo muy fuerte a todos!

Vero.
@embellecethe